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viernes, 23 de mayo de 2014

LOS AMANTES DE TERUEL. Historia en España Medieval


LOS AMANTES DE TERUEL
Historia en España Medieval

En el año 1555, cuando se realizaban unas obras en la capilla de San Cosme y San Damián de la Iglesia de San Pedro en Teruel, España, dos cuerpos que descansaban una sepultura en dicha capilla, aparecieron inexplicablemente momificados. 
Junto a ellos un documento que testimoniaba los sucesos que dieron lugar a la historia y muerte de ambos.







La historia o leyenda de los Amantes de Teruel cuenta la historia de amor entre dos jóvenes de esa región, Isabel de Segura y Juan Martínez de Marcilla.

Sin embargo y debido a las rencillas que padecían ambas familias, ya por rivalidad nobiliaria, ya por razones ideológicas religiosas en tiempos de conflictos judíos, el padre de Isabel se opuso enérgicamente al enlace, si bien dio la opción al pretendiente de que buscase fortuna, y en caso de conseguirla en un plazo de cinco años, daría su consentimiento al matrimonio.





Como el plazo ya vencido su padre buscó un pretendiente potentado celebrando el enlace en 1217, el mismo día en que Juan Diego regresaba de las Cruzadas.
Desalentado ante la noticia, Diego consiguió reunirse con Isabel y suplicarle un beso, al que ella se negó considerando el deber y respeto hacia su marido.
Esta negación produzco un ataque a su amante cayendo muerto al piso.






Sus funerales se realizaron al día siguiente en la iglesia. Isabel, desconsolada ante los acontecimientos, quiso regalarle el beso que antes le había negado y posó sus labios sobre los de su amante; en el mismo instante en que sus labios se unieron ella quedo desvanecida sobre el cadáver; había muerto.






Los familiares, rendidos ante tal acontecimiento, realizaron el mismo día los funerales de ambos y fueron enterrados juntos.
El juez de Teruel, don Domingo Celada, testimonió los hechos por escrito y sepultó el documento junto a los amantes enterrados en la misma sepultura.”









Las momias, una vez descubiertas, fueron expuestas y permanecieron visibles hasta el año 1578 en que por orden del obispo de Teruel, fueron de nuevo devueltas a la sepultura.
El notario Yagüe de Salas, conocedor de la historia, ordena en 1619 un nuevo desenterramiento de las mismas y da fe de ello en un Protocolo Notarial. 
Desde esta fecha hasta 1675, vuelven a estar expuestas al público en la misma iglesia.




Posteriormente fueron guardadas en un dispensario fuera del recinto sagrado, donde permanecieron hasta principios del siglo XVIII, fecha en la que fueron trasladadas a un mísero panteón situado en un claustro anejo a la iglesia. Allí podían ser visitados por los viajeros que acudían incitados por la leyenda que sobre ellos se había creado.




Sobre la mitad de la misma centuria, se colocaron en una urna más apropiada y colocadas en el claustro de la iglesia, donde permanecieron hasta el 27 de mayo de 1902, para ser trasladadas a la capilla en la que han descansado hasta su ubicación actual.

En 1955 el escultor *Juan de Avalos realiza un mausoleo para que los amantes descasaran definitivamente y en paz por el resto de los tiempos, este es el mausoleo que podemos visitar hoy en día.
Desde 1996 se celebra en Teruel, como recordatorio de la tradición, la festividad de Las Bodas de Isabel de Segura.





*Juan de Ávalos y Taborda (Escultor español)
(Mérida, 1911 - Madrid, 2006).
Siendo niño su familia se traslada a Madrid. Estudió en el Colegio de los Mercedarios, en simultaneidad concurría a la Escuela de Artes y Oficios.
Desde niño demostró interés por las Artes; acudía copiar obras escultóricas clásicas, al Casón del Buen Retiro (entonces sede del Museo Nacional de Reproducciones Artísticas
Trabajó de aprendiz con escultores tallistas en madera.
Se inscribe en la Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando, finalizando sus estudios con Premio Extraordinario y Premio Aníbal Álvarez de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.
En 1933, logró una plaza en la Universidad de Sevilla, integró un grupo de trabajos para recuperar de restos romanos, del Teatro románo de Mérida.
Conoció y tuvo amistad con Miguel de Unamuno; es nombrado Subdirector del Museo Arqueológico de Mérida. Lleva a cabo varias exposiciones de sus obras.
Durante la Guerra Civil Española estuvo gravemente herido, durante su recuperación realizó tallas religiosas en madera.
En 1974 nombrado Académico de Número de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid.

Obras de su autoría en distintas ciudades españolas y en el extranjero.
Selección: Arnoldo Gualino

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