sábado, 28 de diciembre de 2013

ANDY WARHOL. Artista Plástico. Pop Art


ANDY WARHOL 
Artista Plástico Pop – Art 

Andrew Warhola. Artista norteamericano (1928-1987); el hijo menor de tres, Andy nacido en el barrio de Oakland, en Pittsburgh, Pennsylvania.
Afectado cuando era pequeño de un trastorno neurológico; encontró consuelo en revistas de celebridades populares y libros de historietas.
En 1949 se graduó en Dibujo y Diseño en el Instituto Carnegie de Tecnología (Universidad Carnegie Mellon).



Como artista comercial obtuvo buenas asignaciones para una variada clientela, como: “Columbia Records”, la revista “Glamour”, “Harpers Bazaar”, “NBC”, “Tiffany & Co”, “Vogue”, entre otros.

Al comienzo se inicia como ilustrador profesional, logrando reconocimiento y aclamado como Diseñador y Artista Gráfico.
En la década de 1950, retorna a la Pintura y el Dibujo.
También diseñó escaparates para las grandes almacenes: “Bonwit Teller” y “I. Millar”.


En 1952 tuvo su primera exposición individual en la “Galería Hugo”; presentó 15 dibujos basados ​​en los escritos del escritor Truman Capote.

Por aquel entonces se destacaba en las artes el “Expresionismo Abstracto estadounidense.
Andy se relacionó con artistas e intelectuales, pero también entre aristócratas, homosexuales, celebridades de Hollywood, drogadictos, modelos, bohemios y pintorescos personajes urbanos.

Sus pinturas incorporan técnicas basadas en las fotografías que desarrolló como ilustrador comercial.
El Museo de Arte Moderno (entre otros), en 1956 reconoce sus valores y lo incluye en una exposición colectiva.



En 1962, en Nueva York, realiza una muestra en la galería “Stable”, presentando el díptico de “Marilyn”; “100 latas de sopa”; “100 botellas de cola” y “100 billetes de dólar”.
Período que da inicio a las imágenes icónicas de productos cotidianos y populares: La sopa Campbell - Botellas de Coca-Cola - La imagen de Marilyn Monroe – Artistas del cine: Troy Donahue o Elizabeth Taylor.
Funda su estudio “The Factory”, donde construía su obra; posteriormente se mudaría a Broadway por donde pasaron celebridades de todos los rubros.

En la década de 1970, muchos de los trabajos más icónicos de Warhol se basan en los artistas emergentes del Pop-Art; los que utilizaban objetos de consumo cotidiano como sujetos.
Basándose en su amplia experiencia en la Publicidad, encuentra y produce arte, con buena técnica, acertada representación y creatividad temática.
Cuando se le preguntó sobre el impulso de pintar las latas de sopa “Campbell”; Warhol respondió: "Yo quería pintar nada. Yo estaba buscando algo que era la esencia de la nada, y eso fue todo”.



Las latas de sopa humildes, pronto ocupan su lugar entre la Marilyn Monroe, muestras de dólar, desastres, y las botellas de Coca Cola como obras esenciales y ejemplares de arte contemporáneo.

Supo capturar cada detalle de la Vida, el glamour de lo ordinario y popular y logró transmitirlo a través de su trabajo, a un público amplio y receptivo.








Su obra
Emblema de la modernidad plástica. Considerado como uno de los artistas más influyentes del siglo XX debido a su revolucionaria obra.
Su producción artística se cruzó con todos los aspectos de la cultura popular, en algunos casos, mucho antes de que se convirtiera en popular.

Adquirió fama con sus trabajos en diferentes expresiones: Pintura, Cine de vanguardia y Literatura. 

Valiéndose de los medios de difusión y la gráfica y  de las nuevas tecnologías, como lo fue el vinilo y la alta fidelidad, las empresas discográficas se encontraron en un contexto comercial completamente nuevo que no tardarían en explotar. RCA contrató a Warhol y a Sid Maurer, para el departamento de diseño de portadas de discos y material promocional.



Diseñó portadas para The Rolling Stones, contribuyó a cortometrajes: Saturday Live Night.
Produjo sus propios programas de televisión para MTV y canales por cable: "Quince minutos de Andy Warhol" y "La TV de Andy Warhol",

Es co-fundador de la revista “Interview”.
Participó en la televisión en un episodio memorable de “The Love Boat”, pintando un retrato con la computadora de la cantante Debbie Harry, record ganador del Grammy.

En 1962 el museo: MOMA, organizó un simposio sobre Arte Pop en diciembre y algunos artistas, entre ellos Warhol, fueron atacados por “rendirse” al consumismo.




Su estilo inicialmente conflictivo, fue progresivamente asimilado por el circuito de galerías y por los círculos adinerados, a los que satisfacía con retratos por encargo.

Desarrolló una intensa actividad en retratos por encargo, convirtiéndose en muy buscado por sus pinturas de colores brillantes de los políticos, artistas, deportistas, escritores debutantes y jefes de Estado.










Sus pinturas, grabados, fotografías y dibujos de esta época incluyen la serie importante, Skulls, Armas de fuego, camuflaje, Mao, y La última Cena.

Contratado por varios fabricantes de automóviles para pintar sus vehículos de competición de una manera que llamen la atención, entre ellos la firma BMW; así surgió el “Art car”.

- "En el futuro todo el mundo será famoso durante 15 minutos”-; frase que vaticinó el actual poder de los medios de comunicación y el apogeo de la prensa amarilla y de los “Reality shows”.



Los Film
Sus primeras películas las lleva a cabo con una cámara “Bolex”, recién comprada en 1963.
En 1965 comenzó a experimentar con el vídeo. Clásicos del cine de vanguardia ahora considerado, las primeras películas de Warhol incluyen “Sleep” (1963), “Blow Job” (1964), “Empire” (1963), y “el beso” (1963-1964).
Con proyecciones ya agotadas en Nueva York, Los Ángeles y Cannes, la pantalla dividida.

El pseudo documental: “Chelsea Girls” (1966) trajo una nueva atención a Warhol del mundo del cine. El crítico de arte David Bourdon escribió, "palabra por la ciudad era cine underground por fin había encontrado su sonido de la música en Chelsea Girls”.

Warhol haría casi 600 películas y alrededor de 2.500 vídeos. Entre ellas se encuentran las películas, 500 de 4 minutos que comprenden de Warhol Screen Tests, que cuentan con retratos inquebrantables de amigos, socios y visitantes de la fábrica, todos considerados por Warhol a estar en posesión de la "calidad de estrella".



Frases
- El arte es lo que dejas salir.
- La inspiración es la televisión.
- Nunca leo, solo veo las imágenes.
- Creo en las luces tenues y los 
  espejos trucados.
- El arte comercial es mucho mejor 
  que el arte por el arte.
- La idea no es vivir para siempre, es 
  crear algo que sí lo haga.
- Si buscas algo el tiempo suficiente, 
  pierde todo su significado.
- Nunca pienso que las cosas 
  mueren; simplemente van a 
  grandes tiendas.
- Toda pintura es un hecho: las 
  pinturas están cargadas con su propia
   presencia.
- En los años ochenta va a haber cada quince minutos un nuevo futuro.
- No creo en la muerte porque uno no está presente para saber que, en
  efecto, ha ocurrido.
- Comprar es mucho más americano que pensar, y yo soy el colmo de lo
  americano.
- La gente debe enamorarse con los ojos cerrados. Sólo cierra los ojos. No
  veas, y será mágico.
- Las atracciones más interesantes son entre dos opuestos que nunca se
  encuentran.


- "Si quieres saber todo sobre Andy 
  Warhol, basta con ver mis      
  pinturas y películas y allí estoy, 
  no hay nada más".
- "Me temo que si uno fija su 
  atención en una cosa el tiempo 
  suficiente, pierde todo su
  significado".
- "He decidido algo: comerciar 
  cosas realmente fétidas.        
  Enseguida se convertirían en 
  éxito en un  mercado masivo que 
  realmente apesta".
- "¿Por qué la gente piensa que lo   
  artistas son especiales? Es sólo 
  otro trabajo".
- "Un artista es alguien que produce cosas que la gente no necesita tener pero que él, por alguna razón, piensa que sería una buena idea darles".
        Artículo: Prof.\ Lic. Arnoldo Gualino

jueves, 26 de diciembre de 2013

RUBÉN WINKLER. Alfarero y Artesano. Rosario, Argentina


RUBÉN WINKLER

Alfarero y Artesano


                                                             Presionando el triángulo activa el Vídeo




ALFARERIA RUBEN WINKLER - Sus orígenes -
Visitamos la antigua “Alfarería Winkler”, en calle Laprida 2053 de Rosario.
Su actual propietario Rubén Winkler un apasionado artista, continuador de este noble oficio artesanal con barro, heredado de su padre que a su vez lo aprendió en Rosario. 
Ubicado en el mismo predio que le dio origen, (hoy el terreno algo más reducido); sobre la calle Comercio (hoy Laprida) y Cerrito, por entonces extramuros de la ciudad.
Un amplio galpón que detuvo el tiempo y atrapó parte de la Historia de Rosario del Siglo XIX y aún continúa en actividad.

Conserva como valioso testimonio de la ciudad; el primitivo horno construido alrededor del año 1876.




Vista desde el centro de Rosario hacia  la zona portuaria, fotografía de principios del siglo XX.

Un poco de Historia
- En un informe elevado a la Junta Gubernativa de Buenos Aires, datada en la Capilla del Rosario de los Arroyos, el 15 de marzo de 1811 por Pedro Tuella (vecino del lugar y considerado el primer historiador de Rosario); quien hace referencia de la excelente calidad de las tierras arcillosas rosarinas o “barro muy fino” de sus barrancas, para la fabricación de baldosas y piezas de loza elaboradas aquí por esos años, que sin duda conocía por su dedicación a la labranza de la región.

 - En la publicación “Guía Civil y Comercial” editada en 1876 por Gabriel Carrasco (1854-1908), un aviso que publicita a la: “Alfarería Nacional” de Hércules Antonietti, ubicado en calle Comercio (hoy Laprida y Cerrito).
La misma producía una variedad de artículos de utilidad doméstica u ornamentos botánicos como elementos edilicios y sanitarios; citando también un local en calle Córdoba 205, donde se pueden adquirir tinajas de todo tamaño (ollas, cacerolas, botellas, braceros, tarros y jarras); macetas, brazos de copa para azoteas y plantas, caños de barro vidriado para acueductos, balaustres lisos y redondos para balcones y jardines, capiteles, ménsulas, modillones y llaves de puertas.
El aviso garantizaba la duración del blanco de los artículos de adorno y anunciaba  la rebaja del 40%  sobre los precios de las fabricadas en tierra romana y yeso.

El término “alfarería”: Proviene del árabe fahhâ = barro, y ésta a su vez del hebreo: hhafar = tierra.
Alfareros son quienes se dedican a elaborar objetos de barro o arcilla decorativos o utilitarios. Proceso que se complementa con el horneado a fuego para darle dureza al objeto y en algunos casos fijar los esmaltes.
Los primeros objetos de alfarería se remontan al período del Paleolítico Superior, se extiende aproximadamente entre el año 35 000  y el 10 000 AC.






Torno de alfarero o rueda de alfarero 
Consiste en una rueda giratoria antiguamente movida con la mano o pie; permite construir una vasija 
con las manos a partir de un trozo de arcilla colocado sobre la rueda.
Su origen se lo ubica entre los siglos VIII a VI a. C., practicado por los fenicios y griegos.








Plaza 25 de Mayo a finales del siglo XIX.

El Origen de la Fábrica Los primeros datos comprobables sobre la alfarería y su propietario Hércules Antonietti, aparecen alrededor de1876. Sabemos que fue un conocido vecino de a ciudad , y se desempeñaba como ingeniero en la Municipalidad de Rosario.
Años después Antonietti vende su fábrica a Bautista Biancafiore, quién ya poseía una empresa de terracota alfarera.

En los relevamientos de las actividades artesanales realizados a finales del siglo XIX, nos dicen que hasta promediar el año 1880, se mantiene estable el número de dos talleres alfareros.
Según lo consignado en los relevamientos entre 1893 y 1900, sobre talleres artesanales alfareros, figuran cuatro en actividad: “Alfarería Nacional” de Hércules Antonietti; Bautista Biancafiore en Bv. Argentino 1310 (Hoy Avda. Pellegrini); César Fornari en Libertad 456 (Hoy Sarmiento) y Poletto y Miazzi.
En el año 1901, aparecen dos nuevos productores; Arturo Figna en Montevideo 1351 y Carmen Peturro en Bv. Santafesino (Hoy Bv. Oroño) y Córdoba.
En 1914, la ciudad contaba con 14 talleres de Alfarería.

Winkler en Rosario
Juan Winkler, nacido en Austria, Viena; a comienzos del siglo XX se traslada a Rosario y se casa con E. Nenthich, el matrimonio tuvo dos hijos: Antonio y Víctor nacido 31-08-1911.
Juan fallece a los 33 años. La joven viuda vuelve a contraer matrimonio con Salvador Sttupa y tiene una hija, Antonia.
Victor Winkler con 7 años, comienza a trabajar con Santiago Capuano dueño de una alfarería ubicada en Ferreira y Génova de la zona de Arroyito, luego se trasladó a Avda. Rondeau próxima a la Bajada Puccio en Alberdi, cuya especialidad era la fabricación de ladrillos huecos.



Horno a leña. Al fondo se puede ver las piezas en el momento de la descarga.

Años después la “Alfarería Nacional” de calle Laprida y Cerrito propiedad de Filomena Patrón, necesitaba un empleado para quemar hornos y fabricar caños.
Víctor se incorpora al taller como empleado.
Por entonces la alfarería producía macetas, recipientes, cacerolas de baño, artículos para desagües: caños, codos, curvas, ramales, piletas de terracota esmaltada con bórax y barbotina.
Estos productos eran vendidos a las empresas: “Hierromat”, “Cachioni Rositto”, “Sanitario Salas” y macetas al vivero Municipal de Rosario.

Víctor es alentado adquirir dicho negocio. En 1947 con 36 años es el cuarto dueño, compra la empresa; pagándolo en cuotas con lo producido en el mismo.
En simultaneidad, para asegurar la materia prima, adquiere tres terrenos por la buena calidad de la arcilla greda en el “Barrio la Guardia”, próximos a la Iglesia de Uriburu y España.
Otro terreno que surtía al taller de materia prima estaba ubicado en Ovidio Lagos al 6.800, cercano al Arroyo Saladillo debiendo descartarse, porque el salitre producía fisuras a los caños.









Como testimonio histórico conservan un fragmento modelado en terracota de un antiguo enano traído de Europa por alguno de los que fueron propietarios de la firma, a finales del siglo pasado.

 Los recuerdos
Rubén Winkler, su actual dueño y continuador de la obra iniciada por su padre; nos cuenta que para ahorrar leña para el horno se quemaban retazos de cueros de una fábrica de calzados como así también los deshechos embolsados de la Yerbatera Martín.
El antiguo y primitivo horno, el de mayor tamaño), se llenaba con piezas de terracota y durante 3 días y cada 3 horas, se alimentaba desde un sótano con leña.
Bajar la temperatura demandaba más de un día y medio; el mismo fue utilizado hasta el año 2003.








Amasadora mecánica para barro.

En 1947, es construido contiguo a este uno más pequeño, también se adquirió un camión Ford volcador para repartir la producción, era conducido por Ernesto, hermano de Rubén.

Un carro tirado por el caballo “Pepe”, era utilizado para traer la materia prima al taller y repartir la producción. 
La empresa llegó a tener 20 operarios, ordenados en distintos sectores de la producción alfarera: preparación de la arcilla, alfareros de torno, decoradores y la parte contable.

Para el amasado del barro utilizaban una noria movida por el burro “Perico”, ubicado al frente del negocio; un día de tormenta un rayo lo mató; fue reemplazado por un caballo.








A comienzos de 1950 se incorpora una máquina para compactar macetas que producía 6 macetas por minuto, la misma había sido diseñada y fabricada en Rosario, por Fabricio Salvador Agosta, utilizando piezas de automóviles.

través del ferrocarril francés, ubicado en la zona de Santa Fe y Vera Mújica, (Hoy Patio de la Madera), se enviaba a la firma “Benítez Hermanos” en Sáenz Peña, Chaco un vagón completo de macetas, para evitar la fragilidad de la carga se intercalaban bolsas de maní.

En 1960, la “Alfarería Nacional” pasó a llamarse “Alfarería Laprida” finalmente “Alfarería Winkler”.
Actualmente, su hijo Rubén Winkler, un apasionado artista-artesano y maestro de este antiguo oficio; habilidad aprendida en su infancia con su padre y lecciones recibidas del maestro en porcelana Rogelio Pezzini sobre modelado de figuras del Barroco y Rococó francés, cuyo taller estaba próximo a su negocio. Este artista había realizado a principios de 1970, estudios de perfeccionamiento de porcelana en el departamento de restauración del Museo Louvre. 

q
Diariamente continúa elaborando piezas con el torno, posee alumnos y recibe delegaciones que visitan el taller con la intención divulgar y darle continuidad a este oficio en extinción.

Uno de sus tres hijos varones ha logrado aprender correctamente las habilidades en el manejo del torno.
Los estantes del viejo galpón amontonan los objetos recién elaborados; junto a las que ya han finalizado el proceso del horneado.
Por Decreto del Concejo Municipal, N° 8524,  la “Alfarería Winker”, fue declarada en el año 1991, de interés Municipal; por considerar técnicas Históricas que son necesarias preservar para la comunidad.
  Artículo y Entrevista: Prof.\Lic. Arnoldo Gualino
    Fuentes de Consulta: (Bibliografías) www.arnoldogualino.com.ar

viernes, 20 de diciembre de 2013

RUBÉN SEVLEVER. FABRICIO SIMEONI.



Señales – DIARIO LA CAPITAL
Domingo 15 de diciembre de 2013

FABRICIO Y RUBÉN
Por Rubén A. Chababo
El Pasaje Zabala fue rebautizado hace poco con el nombre de Fabricio Simeoni. En la misma calle vivió el poeta, Rubén Sevlever, olvidado en el homenaje.
Desconocía que el poeta Rubén Sevlever vivió buena parte de su vida en el Pasaje Zabala.








El Poeta, Rubén Sevlever

La noticia de la muerte de Fabricio Simeoni ocupó, por imprevista, las páginas de casi todos los medios locales. Su trayectoria pública lo había ubicado como un verdadero referente para todos aquellos que se esfuerzan en vencer las adversidades con que la enfermedad castiga al cuerpo humano.
Muy poco tiempo después de su muerte, un grupo de amigos propuso que el Pasaje Zabala pasara a tener su nombre. Un justo y merecido reconocimiento que olvidaba, acaso por la premura de la iniciativa, la sombra errante de Sevlever por esa misma calle.
Hubo quienes propusieron entonces, que antes de que se sancionara la ordenanza que daría lugar al cambio de nombre, se impulsara un acto de generosidad que alcanzara también a Rubén. La propuesta era entonces que el Pasaje pasara a llamarse "De los poetas". De ese modo, quedarían incluidos en la toponimia, la vida y la memoria del poeta joven y la del poeta viejo, el recuerdo de los dos escritores que allí escribieron e imaginaron buena parte de sus versos.
Entre Rubén y Fabricio había, entre las muchas diferencias que marcaron sus vidas y sus textos, el hecho del casi desconocimiento de la obra del primero. Rubén fue un escritor silencioso, de escasos libros, leído por un círculo muy pequeño de lectores pero poseedor de una poética que valiosos escritores y amigos de su propia generación como Juan José Saer, Noemí Ulla, Hugo Padeletti, Jorge Isaías o Aldo Oliva supieron reconocer en vida.
Ningún concejal de nuestra ciudad está obligado a saber de poesía ni mucho menos a conocer la obra de ningún poeta. No es su materia. Sin embargo, si alguna voz les advierte de algún olvido, sería importante que allí pusieran su oído para restañar lo que falta. Según lo aparecido en los diarios en estos días, alguien sugirió que el Pasaje incluyera también al poeta "mayor", pero el pedido no fue escuchado.
Finalmente, según lo que cuentan las noticias, la breve calle pasará a tener con justicia el nombre de Fabricio Simeoni. Y con gran injusticia, quedará relegado el del otro poeta, habitante real de esa misma calle. Con muchos menos flashes a su alrededor, con escasos reconocimientos públicos, Rubén Sevlever, el poeta silencioso, seguirá arrastrando su casi invisible figura en nuestro provinciano paisaje urbano.
Sería bueno que alguna vez logremos corrernos de la inmediatez mediática que logra iluminar algunos rostros y algunas vidas, ensombreciendo, injustamente, por ignorancia o desdén, las de otros. Sería bueno que alguna vez logremos evitar reconocer solo lo que destella a primera vista, para atrevernos a la aventura de descubrir, aunque implique de nuestra parte un gran esfuerzo, aquello que humildemente titila en el corazón de las sombras.
Al fin y al cabo, quienes conocieron a Fabricio, quienes gozaron de su amistad y de su simpleza, pueden imaginar que a él mucho le hubiera gustado compartir su nombre con Rubén.




UNA VIDA, UNA OBRA

Rubén Sevlever nació en 1932 en Rosario.
En la década de 1950 integró un grupo de notables escritores, donde se encontraban Hugo Gola, Aldo Oliva, Hugo Padeletti y otros.
El primer medio de difusión de aquellos escritores fue Pausa, revista que Sevlever dirigió entre 1958 y 1961.
En los años 60 fundó la librería Aries, que se convirtió en un intenso centro de actividad cultural.
En 1966 la Editorial de la Biblioteca Vigil le publicó su primer libro, Poemas 1958-1965, al que siguieron Poemas inéditos (1982) y Enjambre de palabras (1995) con el que obtuvo varios premios.
Falleció en enero de 2011. Ediciones UNL, la editorial de la Universidad Nacional del Litoral, publicó su libro póstumo, Poemas elegidos, en 2012.


sábado, 14 de diciembre de 2013

INSTALACIONES ARTÍSTICAS. 2013. Facultad de Bellas Artes - Escuela Prov. de Artes Visuales. Rosario, Argentina


MUESTRA DE INSTALACIONES ARTÍSTICAS   
              - 2013. Rosario, Argentina -

Alumnos
Facultad de Humanidades y Artes
Escuela Provincial de Artes Visuales

Cátedra Prof.\ Lic. Arnoldo Gualino

“La Toma - Espacio Cultural” – Tucumán 1349. Rosario


jueves, 12 de diciembre de 2013

5ta. FERIA DE LIBRERÍAS DE VIEJO DE ROSARIO. Centro Cultural R. Fontanarrosa


9° FERIA - ROSARIO

Librería de Viejo - 13, 14 y 15 de diciembre

de 10 a 20 Hs.


CENTRO CULTURAL FONTANARROSA


San Martín 1080 - Rosario









Libros usados, raros, antiguos, desatalogados, Revistas, 1° Ediciones, de Autor, Revistas y Diarios antiguos.

































Participan librerías locales con el objetivo de mostrar los libros que habitan en las bibliotecas. En esta edición estarán presentes las librerías Amauta, El Lugar, El Caburé, Argonautas, El Pez Volador, La Pluma Libros, Armando Vites Librero Anticuario, Libros Macedonio, Leo Libros, Libros Severino, El Viejo Almacén y Mal de Archivo.





miércoles, 11 de diciembre de 2013

TANGO. Día del Tango. 11 de Diciembre

DÍA DEL TANGO
11 de diciembre

Conmemora los natalicios de Carlos Gardel (el “Zorzal Criollo”); y de Julio De Caro, gran director de orquesta y renovador del género.
Fue Ben Molar quien impulsó la instauración del 'Día Nacional del Tango', que se festeja en todo el mundo cada 11 de diciembre. 

Desde su idea inicial en 1965 mientras iba camino al cumpleaños de Julio De Caro y la presentación de su propuesta al Secretario de Cultura Municiapl, hasta las lentas resoluciones burocráticas pasaron largos once años; finalmente salió el Decreto Nº 5830/77 de la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, que reconoce el día del Tango.

El 11 de diciembre de 1977, se llevó a cabo un gran Festival de Tango en el Luna Park; reuniendo a músicos, orquestas, cantantes y todo el mundillo circundante. Unas 15 mil personas que cantaron el felíz cumpleaños a Julio De Caro.
El 23 de diciembre de ese mismo año, a pedido del Secretario de Estado de Cultura de la Nación, Doctor Raúl Alberto Casal, se organizó una despedida tanguera en el teatro Cervantes de Buenos Aires, presentando a gandes celebridades de este género musical y dando lectura al importante Decreto que establecía Día Nacional del Tango”.



Ilustración litográfica de 1859 Montevideo. Representa un baile de negros.

Que es el Tango
El término “Tango” ó "tambo", tiene su origen durante los siglos XVIII y XIX el el virreinato del Río de la Plata. Hacía referencia 9 los lugares en que bailaban los negros.
El “tráfico de negros” o la “esclavitud”; tuvieron a Buenos Aires y Montevideo como centros principales. A partir de la guerra de independencia contra España, se inicia en el país un proceso de Independencia y en 1853 es abolida la esclavitud en la Argentina.
El tango, expresión musical y danza al comienzo, fue conformada con los aportes expresivos de las culturas: africanas, indígenas, latinoamericanas y las diferentes vertientes de culturas europeas que imigraron al Río de la Plata.

En la segunda mitad del siglo XIX, surgieron las academias, milongas, pirigundines elementos que originaron el tango.
La más antigua de las academias de Buenos Aires, es de 1830, la de “Pardos y Morenos”. Luego fueron surgiendo otras en 1854 apareció la Academia de la “Parda Cármen Gómez”.
Era una música y danza eminentemente popular, rechazada y prohibida por las clases altas y la Iglesia Católica, por lo que se desarrolló en los barrios pobres de los suburbios (los arrabales), los puertos, los prostíbulos, los bodegones y las cárceles, confluencia de los inmigrantes y la población local, descendientes en su mayoría de indígenas y esclavos africanos.
Una manera muy diferente de bailar, tal vez algunos elementos formales del Vals, pero a modo de un fundido abrazo de pareja y sensualidad de movimientos autónomos, en que la mujer acompaña y responde la danza al varón.

Instrumentos musicales: El tango nació como música instrumental de violín y guitarra a veces flauta, exclusivamente para ser bailado. Con el tiempo incorporó el canto, casi siempre solista, eventualmente a dúo, sin coro, pero manteniendo de manera bastante marcada la separación entre tangos instrumentales y tangos cantados.
El organito constituyó en las últimas décadas del siglo XIX un infaltable instrumento. 

El piano requería de un espacio cerrado, su tamaño y costo lo hacían menos habitual; el bandoneón es un instrumento inventado en Alemania a mitad de 1840, como órgano portátil.
Una de las primeras características de la música tanguera fue la exclusión de los instrumentos de viento-metal y percusión, para lograr una sonoridad sin estridencia, intimista, cálida y sensual.
En las primeras décadas del siglo XX no existía la radio, el cine era mudo y el teatro era muy popular.




Partitura musical de Eduardo Arolas


Pascual Contursi, Celedonio Flores, Enrique Santos Discépolo, Homero Manzi por citar fueron gente de teatro que también escribían versos para las obras.
El “tango lunfardo”, está plagado de expresiones italianas y africanas; que el ritmo tanguero y su clima nostálgico nos recuerda a la habanera cubana.

El “tango, milonga, malambo y candombe”, parte de una misma familia musical de raíces africanas y también de las costumbres provenientes de los gauchos que migraron a  la ciudad.
En 1898 se imprime el primer tango con autor registrado, "El entrerriano", de Rosendo Mendizábal, considerado por muchos conocedores como el primer tango propiamente dicho. 
En esta época el tango se independiza de la milonga y adquiere una definida personalidad propia.



A los primeros años del siglo XX el tango gradualmente comienza a llegar a públicos más amplios, espectáculos teatrales, cafés, carpas, circos, salones de baile y cabaret. 
El tango original canyengue fue eliminando directamente los cortes y quebradas, y comienza a bailarse en la calle y en los patios de los conventillos, hasta que en los años 1920, comenzara a dominar el llamado “tango de salón”.



Primeras grabaciones: A partir del 1901 grabadas por músicos argentinos, mediante los recientes inventos del fonógrafo (cilindros) y el gramófono (discos). Entre las grabaciones de tango más antiguas se encuentran "El pimpollo" (1904), "El negro alegre" (1907) y "El choclo" (1907) de Ángel Villoldo; "Patagones" (1905) de Gabino Ezeiza. Don Juan" (1910) por la orquesta típica de Vicente Greco, la primera grabación con bandoneón.



Tango de Salón – Palais de Glace
En 1912, el barón Antonio De Marchi, clubman y bon vivant, organizó en el Palais de Glace una velada trascendente para el futuro del tango. 
La orquesta típica al mando de Genaro Espósito, y los pasos del bailarín Enrique Saborido, significaron el ingreso del tango a los salones de la alta sociedad porteña.

En 1915, la pista de patinaje fue reemplazada por un salón de baile, que recibió a algunas de las orquestas más importantes de la época, entre ellas las de Francisco Canaro y Roberto Firpo, y a los músicos Enrique Delfino y Juan Carlos Cobián.
Enrique Cadícamo dedicó una de sus letras para recordar el esplendor del Palais de Glace.



Por aquellos años tuvo en Carlos Gardel (1890-1936) a un asiduo concurrente. 
En la célebre madrugada del 11 de diciembre de 1915, una patota de “niños bien” provocó una pelea con Gardel y sus amigos, y el episodio culminó a unas cuadras del edificio con Gardel baleado en un pulmón, plomo que lo llevó por el resto de su vida.

En la década de 1920 se destaca la actuación de la orquesta de Julio De Caro como orquesta oficial del Palais de Glace, que sufrió por aquellos años algunos intentos de activarlo; modifican su nombre; primero como: Vogue´s Club, luego: Cyros. 
A finales de la época del ´20 marcan el declive de su esplendor.
En 1931 el edificio pasa al Ministerio de Educación y Justicia para albergar a la Dirección Nacional de Bellas Artes.

Guardia Vieja 1895-1925: Etapa primitiva o de gestación, anónima y popular, centrada en las comunidades afro-rioplatenses y en las "orillas" (orillera) de la ciudad, en la que el tango adquirió identidad propia, Alrededor de 1880, comenzó a ser registrado por músicos profesionales y alcanzó una amplia difusión geográfica y social. 
Desde 1900 a 1920, es una etapa de definición estilística.



Orquesta típica de Julio De Caro

Guardia Nueva 1925-1950: El tango alcanza madurez, refinamiento y difusión internacional. Como resultado de esta evolución, el tango alcanza su llamada Edad de Oro, con eje en la década de 1940 y parte de 1950. Luego de esta época llega una época de crisis y decadencia para el tango.

El uso del término "orquesta típica", quedó ligado al tango. En sus orígenes el tango se ejecutaba con guitarras, flauta y violín, y más tarde, el bandoneón sustituiría a la flauta





Etapa piazzolliana: Con Astor Piazzola (1921-1992) bandoneonista y compositor argentino, considerado uno de los mejores músicos del siglo XX. A partir de 1970, produjo en el tango un notable cambio.

Etapa de Tango – Fusión: Es la mezcla del tango tradicional con la música electrónica contemporánea. Nació a partir de la iniciativa del intérprete, compositor y productor Victorio Menghi, para que géneros tales como pop, rock, blues, electrónica, música sinfónica, ambiental y electroacústica se combinaran con el tango.


*Jorges Luis Borges, Poema de Tango “El Otro, El Mismo”. (1964).
Música: Astor Piazzola
¿Dónde estarán?, pregunta la elegía
de quienes ya no son, como si hubiera
una región en que el Ayer pudiera
ser el Hoy, el Aún y el Todavía.

¿Dónde estará (repito) el malevaje
que fundó, en polvorientos callejones
de tierra o en perdidas poblaciones,
la secta del cuchillo y del coraje?

¿Dónde estarán aquellos que pasaron,
dejando a la epopeya un episodio,
una fábula al tiempo, y que sin odio,
lucro o pasión de amor se acuchillaron?

Los busco en su leyenda, en la postrera
brasa que, a modo de una vaga rosa,
guarda algo de esa chusma valerosa
de los Corrales y de Balvanera.

¿Qué oscuros callejones o qué yermo
del otro mundo habitará la dura
sombra de aquel que era una sombra oscura,
Muraña, ese cuchillo de Palermo?

¿Y ese Iberra fatal (de quien los santos
se apiaden) que en un puente de la vía,
mató a su hermano el Ñato, que debía
más muertes que él, y así igualó los tantos?

Una mitología de puñales
lentamente se anula en el olvido;
una canción de gesta se ha perdido
en sórdidas noticias policiales.

Hay otra brasa, otra candente rosa
de la ceniza que los guarda enteros;
ahí están los soberbios cuchilleros
y el peso de la daga silenciosa.

Aunque la daga hostil o esa otra daga,
el tiempo, los perdieron en el fango,
hoy, más allá del tiempo y de la aciaga
muerte, esos muertos viven en el tango.

En la música están, en el cordaje
de la terca guitarra trabajosa,
que trama en la milonga venturosa
la fiesta y la inocencia del coraje.

Gira en el hueco la amarilla rueda
de caballos y leones, y oigo el eco
de esos tangos de Arolas y de Greco
que yo he visto bailar en la vereda,

en un instante que hoy emerge aislado,
sin antes ni después, contra el olvido,
y que tiene el sabor de lo perdido,
de lo perdido y lo recuperado.

En los acordes hay antiguas cosas:
el otro patio y la entrevista parra.
(Detrás de las paredes recelosas
el Sur guarda un puñal y una guitarra.)

Esa ráfaga, el tango, esa diablura,
los atareados años desafía;
hecho de polvo y tiempo, el hombre dura
menos que la liviana melodía,
que sólo es tiempo. El tango crea un turbio
pasado irreal que de algún modo es cierto,
un recuerdo imposible de haber muerto

peleando, en una esquina del suburbio.


                         Artículo: Prof.\ Lic. Arnoldo Gualino